Ayer se realizó la audiencia de formulación de cargos. La fiscalía a cargo de Gabriela Macaya y el asistente letrado Federico Cuneo acusaron a Valenzuela de homicidio agravado por el uso de arma y a Castillo como partícipe necesario.
Pero hubo además otro involucrado, un tercero que estaba en el auto que manejaba Castillo y que todavía no fue identificado. Pero que es buscado por estaba armado y apuntó con ella a Cristian Marchant, amigo de David Lago y testigo del hecho, para no se moviera. Este tercer involucrado quedó filmado e iba en el asiento del acompañante del vehículo VW Voyage de color negro.
La prisión preventiva es por dos meses para los acusados, ya que se consideró probado que quitaron el polarizado del auto desde el que efectuaron el homicidio, le cambiaron la patente también, en un intento por desviar la atención de los investigadores lo que se consideró otra razón por la que no podían tener prisión domiciliaria. Es decir que hay peligro de entorpecimiento de la investigación.
Lago fue perseguido por Valenzuela para darle muerte, según quedan registros fílmicos que tiene la fiscalía en su poder. Hay dos videos, uno del centro de monitereo de cámaras urbanas de Plaza Huincul y otro de una vivienda particular.
En los dos se ve la secuencia en la que Lago y Marchant iban caminando, doblan por Mérida y ven el auto en el que iba Valenzuela. Este se baja del auto, Lago comienza a correr y Valenzuela le dispara cinco veces y le acierta un disparo que resulta mortal.
El homicidio habría sido ejecutado con un arma calibre 380, de grueso calibre. El proyecto quedó alojado en el cuerpo de Lago y también la policía secuestró un arma servida del mismo calibre donde fue el homicidio.
Un vecino vio un chico tirado en la vereda y pidió ayuda a la policía pero otro vecino lo cargó en el auto y lo llevó al hospital pero llegó sin signos vitales. El disparo ingresó por la espalda, entre las escápulas y generó daños mortales.