El martes se hizo público un comunicado, sin firmas para evitar represalias, en el que se le reclamaba a Rolando Figueroa que cumpla con sus promesas de campaña.
Allí se pedía “no solo tener un salario digno, sino el horario acorde que prometio de 12×36 para todo el personal, no solo Sargentos Ayudantes a Suboficiales Mayores. También recursos para poder desempeñar las tareas de seguridad como corresponden, nos debemos a la comunidad y hoy, efectivos policiales de distintas unidades tienen que poner sus vehículos particulares para cubrir perimetrales y consignas de personas condenadas a prisión y que gozan de Domiciliaria entre tantas injusticias”.
Al día siguiente se firmó un acuerdo en el que se equipara el sueldo del jefe de policía con el de un ministro, medida que inmediatamente eleva toda la escala salarial porque se calculan los sueldos a partir del salario mayor.
Por otra parte, a partir del 1 de noviembre por un decreto provincial la Policía recibirá además, un aumento por IPC similar a los otros empleados públicos, con dos bonos en diciembre y febrero. Se trata de 260 mil pesos cada uno que le asegurará a la Policía, una recomposición salarial inédita para los próximos cuatro meses.
El jefe de policía Tomás Diaz Pérez destacó el reconocimiento del gobernador que permite “abrir ese aumento hacia todo el personal policial”. Desde agentes al Jefe de Policía, va escalonado y va a diferenciar las distintas jerarquías”, indicó.
Y consideró que se trata de un reconocimiento “a todos los logros que se han hecho en materia de seguridad, investigativa, de tránsito y capacitación”.