Agustín Albornoz, director provincial de Seguridad Vial de Neuquén, presentó una grave denuncia contra la funcionaria provincial Luciana Ortiz Luna, quien se desempeña como secretaria de Emergencia y Gestión del Riesgo. Albornoz asegura haber sido víctima de discriminación y violencia laboral tras ser diagnosticado con VIH y desplazado de su cargo, a pesar de encontrarse bajo licencia psicológica.
En una entrevista con LU5, Albornoz relató que, después de recibir su diagnóstico, presentó un certificado psicológico para explicar su situación médica y obtener apoyo emocional. Sin embargo, denunció que dos días después de haber entregado el certificado, se enteró de que su puesto había sido asignado a otra persona sin una comunicación oficial. “Me dijeron que todo estaba bien, pero luego me informaron que mi problema de salud se había filtrado y que me habían reemplazado”, relató visiblemente afectado.
El funcionario también fue notificado de un sumario administrativo por supuesta falta de rendición de fondos, una acusación que Albornoz refutó, asegurando que toda la documentación relacionada estaba en orden. “Me enteré de este sumario tres días antes de que me lo enviaran, y me parece injusto, porque siempre trabajé con transparencia”, indicó.
Albornoz asegura que fue Ortiz Luna quien habría ordenado su reemplazo, lo que llevó a que tomara la decisión de presentar una denuncia por discriminación y violencia laboral. “Es una locura, ya vengo siendo víctima de discriminación desde el inicio de la gestión”, señaló.
Maltrato Laboral Previo
El denunciante también mencionó que su relación con Ortiz Luna no ha sido fácil desde el principio, con antecedentes de maltrato laboral que, según él, se han registrado desde su incorporación al cargo. “Esto no es la primera vez que pasa. Es la forma de ser de ella”, aseguró, aunque evitó hacer referencia a otros casos específicos dentro de la administración provincial.
Por otro lado, Albornoz expresó su agradecimiento al gobierno provincial y al Ministerio de Seguridad por el apoyo recibido en este difícil proceso. Aseguró que, aunque la situación le ha generado un impacto psicológico considerable, continúa recibiendo asistencia a través de una psicóloga y desde la oficina de violencia laboral del gobierno.
Este caso resalta la necesidad de mejorar las políticas de inclusión y respeto en los entornos laborales, así como la protección de la privacidad médica de los trabajadores, para prevenir abusos o malas prácticas dentro del ámbito público.
