El Ministerio de Educación de la provincia del Neuquén llevó a cabo la tan esperada inauguración de la ampliación de la Escuela Provincial de Educación Técnica N°1 “Margarita Salinas de Páez” en Cutral Co en la mañana de hoy viernes 7 de febrero, una obra significativa en la comarca.
El Ministerio de Educación de la provincia del Neuquén, encabezado por la ministra Soledad Martínez, ha finalizado los trabajos de ampliación y adecuación del establecimiento.
La ceremonia contó con la presencia de autoridades provinciales y locales, entre ellas, el intendente Ramón Rioseco, el ministro de Gobierno, Jorge Tobares, y la subsecretaria de Obras Delegadas de la Secretaría de Obras Públicas, arquitecta Tania Coletti. También estarán presentes representantes de la empresa constructora Black Hall, el defensor de los Derechos del Niño y Adolescente Lautaro Arévalo, y el equipo de la escuela, entre otros.
Durante el proceso de la obra, la comunidad educativa enfrentó dificultades debido a la falta de un espacio adecuado para realizar las prácticas técnicas. Esto obligó a los estudiantes a adaptarse a un ciclo lectivo atípico, en el que se tuvieron que desdoblar las clases y algunos cursos se dictaron de manera virtual.
La EPET N°1, representada por su vicedirector Marcos Lincoln, destacó el esfuerzo de los docentes, alumnos y padres para superar las dificultades y seguir adelante con el ciclo lectivo en condiciones complejas, “tanto docentes como estudiantes pusieron toda su disposición para asegurar mantener el encuentro pedagógico” expresó.
“Muchísimas gracias a todos, a pesar de los contratiempos, lo hemos logrado. Esto es un paso importante para todos” remarcó Darío Buchini, jefe del Taller.
La comunidad educativa de la escuela, por su lado, expresó sus preocupaciones durante la inauguración. “No ha existido, en 35 años, ningún tipo de mantenimiento y atención a este tipo de instituciones” sostuvo Anahí Dolz, como representante de la comisión de padres.
“Es muy difícil decir agradecimiento cuando, además, debemos sumarle que esta obra de ampliación, luego de que fue terminada, surgieron temas técnicos, producto de la falta de supervisión correcta por la utilización de materiales de mala calidad” comentó Dolz.
En representación del centro de estudiantes, una alumna compartió las dificultades vividas durante el año pasado, subrayando las emociones que generó la incertidumbre de no contar con un edificio adecuado para estudiar, la falta de prácticas en los talleres técnicos y “las peleas constantes con toda la comunidad para defender lo que creíamos correcto y lo que nos merecíamos: un salón para estudiar”.