Gladys Rosario Gimenez Ortiz era una mujer paraguaya que ejercía la prostitución en Plaza Huincul. La mataron en un descampado cerca de Mari Menuco y por su muerte será juzgados dos hombres y una mujer, que la habrían matado porque intentó salirse del prostíbulo y trabajar por su cuenta.
Según informó el Ministerio Público Fiscal, dos hombres cuyas iniciales son JGC y ABD serán juzgados por el homicidio calificado por el uso del arma de fuego en calidad de coautores. En tanto que la mujer sólo identificada como FMA está acusada de ser partícipe secundaria.
Durante la audiencia el fiscal relató la teoría del caso, de acuerdo a la cual J.G.C. mantenía una relación sentimental con la víctima. Mediante engaño, la convenció de trasladarse desde Plaza Huincul -donde vivía- hacia Neuquén para la compra de un terreno.
El 24 de enero J.G.C. recibió a Gladys Rosario Giménez Ortiz en la terminal de ómnibus y se trasladaron en taxi para encontrarse con A.B.D. Juntos, en otro vehículo, se dirigieron hacia la zona rural de Vista Alegre -paraje Lindero Atravesado- dónde fue despojada de sus pertenencias y obligada a arrodillarse. En esa posición le efectuaron tres disparos que provocaron su muerte.
Por su parte, la mujer fue acusada por el representante del Ministerio Público Fiscal de ayudar a J.G.C. a conseguir el arma. “Fue la intermediaria entre el proveedor y uno de los imputados, y recibió también ropa que pertenecía a la víctima sabiendo lo que había sucedido”, señaló.
Los tres imputados serán juzgados por un tribunal, dado que la pretensión de pena es inferior a los 15 de prisión de cumplimiento efectivo.
Antes de formalizar la acusación, Breide Obeid solicitó a Zabala el sobreseimiento de Juan Carlos Acuña, quien había sido involucrado por un testigo -que ahora está imputado por el delito de falso testimonio- en el homicidio.