En la sesión de hoy, el Concejo Deliberante de Huincul autorizó por el voto mayoritario del oficialismo autorizar al intendente Gustavo Suárez a que compre el excine Ruca Lighuen a la empresa YPF, por 45 millones de pesos.
Desde la oposición los ediles Gustavo Iril (Compromiso) y Ramón Lecaro (UC-FN) votaron en contra y fundamentaron su postura no en que el edificio se incorpore al patrimonio municipal sino en el desembolso de 45 millones que hará el municipio. La propuesta de la oposición esgrimida es que fuese una cesión del inmueble como reparación histórica para la ciudad.
Si bien la autorización no tuvo mayores dificultades porque el MPN tiene la mayoría automática, hubo fundamentos y opiniones cruzadas. En principio, el concejal Iril, esgrimió su postura negativa en la modalidad de la gestión. “El municipio no necesita de ninguna manera pagar 45 millones de pesos para realizar mejoras o restauraciones. Desde el 2000 o 2001, o 2002 encontramos partidas presupuestarias para este espacio”, señaló.
A lo largo de su fundamentación expresó que, a su entender, prefiere que el dinero sea “utilizado en acelerar obras que tienen a cientos de estudiantes sin clases, a cientos de familias sin gas, y creo que hoy por hoy el intendente está cometiendo un error importante al apurar una ordenanza”. Iril dijo que es necesario hacer un “debate abierto a la sociedad e interpreto un nuevo negociado entre este gobierno del MPN y que considera que 45 millones de pesos se los quiere regalar a una empresa privada”.
Por su parte, Ramón Lecaro tampoco compartió las gestiones que “estuvieran orientadas para que esta sesión sea de manera gratuita al estado municipal y teniendo en consideración todo lo que han entregado los vecinos de Plaza Huincul, a la empresa a modo de una reparación histórica”.
Fue la edila Mónica Sarmiento la encargada de fundamentar la necesidad de “defender el patrimonio cultural. Hoy podemos rescatar un espacio para la cultura. El mensaje es poner en blanco sobre negro, poner en la trama urbana un mojón que el cine Ruca Lighuen de YPF sea un espacio de la comunidad”.
Luego, la concejala Gabriela Gendana le responsió a Iril al señalar que “bajo ninguna circunstancia fuimos presionados por el Ejecutivo para aprobar este proyecto. Hicimos gestiones para informarnos bien de este tema, averiguamos y estamos seguros para aprobarlo”.
El concejal Sergio Martínez fue el más enfático al indicar que “estamos en el buen camino, estamos haciendo cosas que no se hicieron antes. Antes no se hablaba de Huincul siempre se habló de otro vecino nuestro”. “El tema es clarito. Estuvimos con seis reuniones, con seis especialistas y distinta gente que no tenía intereses y realmente para nosotros es importantísimo que un edificio declarado patrimonio histórico sea nuestro”.
Su compañero Bruno Porco dijo que YPF sigue siendo el titular de la manzana y que dentro de ella hay vecinos. “Se pedía mucha plata y acompaño las negociaciones al obtener ese edificio para que sea de la comunidad y los vecinos el día de mañana tengan la titularidad de sus lotes, porque hoy para YPF figura terreno baldío. Entiendo también la postura de los concejales que también merecemos un resarcimiento”, acotó.
Finalmente, la presidenta del cuerpo, Marga Yunes lo puso a consideración y contó con cinco votos afirmativos (Yunes, Gendana, Sarmiento, Martínez y Porco) y los dos negativos (Iril y Lecaro).