En el sector donde ocurrió la inundación la calzada está muy deteriorada. Si bien no se levantó el asfalto y tampoco hay pozos importantes, las ondulaciones son continuas y hay mucha tierra en suspensión.
Como es habitual la ruta es utilizada por miles de vehículos por día, incluso algunos imprudentes la transitan a gran velocidad, pero la mayoría baja su marcha y no realiza sobrepasos porque no hay banquina.
Las máquinas de Vialidad Nacional y la empresa que tiene a cargo el mantenimiento de la ruta están trabajando en la zona, para mejorar sus condiciones.