El cierre de la propuesta que incluyó el encendido del del árbol en el parque lineal Carlos Rivadulla y la presentación del grupo Élevé fue aplaudido por cientos de vecinos que se acercaron hasta el predio del ferrocarril la noche del jueves.
Pasadas las 22, y después que quedara encendido el árbol de navidad, todos se trasladaron hasta el predio del exferrocarril, al costado de pasaje velo donde estaba montada la grúa y el escenario.
La música le dio el puntapié al globo terráqueo suspendido en el que las y los acróbatas con el vestuario que en algunos casos estaba iluminado, empezaron la propuesta. La grúa fue la encargada de mover a la enorme estructura elevada que giraba sobre el público.
En un momento arrojaron plumas y se simulaba la nieve que caía sobre los presentes. También la escasa distancia que en determinados momentos quedaba entre el público y quienes estaban suspendidos en la parte inferior del globo terráqueo daba la sensación de estar muy cerca.
La orquesta de cuerdas y un cuerpo de danzas ofrecieron dos obras y luego volvieron los artistas de Élevé. El buen clima hizo que la noche fuera inolvidable para muchos que, por primera vez, vieron un espectáculo de este tipo en la ciudad.