Esta situación no hace más que poner en evidencia que hace falta más acción gubernamental, en todos los ámbitos, para el abordaje de los consumos problemáticos.
El caso está en manos de la Defensoría del Niño y el Adolescente de Cutral Co, que tomó cartas en el asunto para poner a la criatura a resguardo.
La situación se habría detectado durante un procedimiento policial en el que se pidió intervención del estamento judicial de asistencia a la Niñez.
Más allá del caso en particular, que deberá ser atendido por las organizaciones correspondientes, es un alerta sobre lo que ocurre en Cutral Co y Plaza Huincul relacionado con la venta pero principalmente el consumo de estupefacientes.