La joven Luciana Muñoz lleva varias semanas desaparecida y ayer finalmente detuvieron a su ex pareja, aunque las pruebas en su contra son todavía inconsistentes.
Se lo acusó de falso testimonio, él declaró ante la policía y ante la fiscalía y mintió. Eso sostienen los investigadores. Se trata de Maximiliano Aviles, un hombre de 29 años que había mantenido una relación romántica con Luciana en abril y mayo pasado.
Cuando la policía lo entrevistó, dijo que no la había visto y que no había salido de su casa durante las horas que Luciana desapareció. Pero hay testigos de que estuvo con ella y según su teléfono, recorrió unos 7 kilómetros en 11 minutos el día que desapareció.
Esas pruebas alcanzan para acusarlo de haber mentido, pero todavía no lo relacionan con la desaparición de la joven. La fiscalía quiere tenerlo detenido pero el juez aseguró que no aplica la prisión preventiva para falso testimonio pero lo dejó unas horas más en la cárcel hasta que se analice si el lugar donde estaría con detención domiciliaria es adecuado.
