El joven de 18 años comenzará cumplir, en diez días, una pena de diez años de prisión por la muerte de Romero. Pero ese mismo día un grupo de personas incendió la casa que compartía con su hermano. Por esa agresión no habrá juicio ni condena.
La fiscal Gabriela Macaya explicó que se demoraron a muchas personas ese diez de octubre, cuando ocurrió el homicidio de Ariel Romero. Hubo graves incidentes que terminaron en el incendio de la vivienda donde Virulón y su hermano de 19 años vivían, sin otros familiares.
“No se pudo determinar quién cometió el delito por eso no se realizó una causa judicial”, dijo la fiscal. Ayer se oficializó el acuerdo al que habían arribado la defensa y la fiscalía, por el cual Virulón se declaró culpable y recibió el mínimo de la pena para el delito de homicidio simple con el uso de un arma de fuego, que son diez años de prisión.