Independiente ganó por 61 a 60 en su visita a La Cueva en un partido vibrante que se definió en la última bola. Hubo discusiones en el final porque Santiago Frola fue derribado pero los jueces entendieron que no fue falta.
Al Matador le costó mucho la primera mitad del partido ante el Rojo de Neuquén y después de muchos errores terminó abajo por 11 puntos en el tanteador (26-37), pero todo lo que Independiente hizo bien en los dos períodos iniciales se derrumbó en el complemento, mientras que el Naranja lo remontó de a poco y a menos de un minuto para el final logró ponerse arriba por 60 a 58, pero cometió dos faltas en el cierre y la visita logró encestar 3 de 4 simples para pasar al frente (61-60).
La última jugada fue para Petro con sólo 4 segundos en el reloj. Frola los usó para entrar al perímetro y fue derribado, pero los jueces entendieron que no hubo falta y el tiempo terminó para darle los puntos al equipo de la capital.