299deportes juntó a las jugadoras y pilotos más relevantes de la comarca y en su día Internacional hablaron de lo que significa ser mujer y deportista. Manifestaron no sentirse en desventaja y tampoco discriminadas.
Hoy se conmemora el día internacional de la mujer y ya no es un día para que las féminas reciban flores, chocolates o algún presente, sino que se convirtió en un día de lucha y reflexión.
299deportes pudo reunir a chicas y mujeres destacadas en sus ámbitos para hablar del papel que desarrollan como deportistas mujeres en una sociedad que en algunos sectores, vulnera sus derechos y libertades.
De izquierda a derecha asistieron Cecilia Hugo que en el enduro de Cuatriciclos logró varios podios y peleó el campeonato en el 2017; Gianella Espedale y Mirta Durán que son madre e hija amantes del básquet; Jazmín Sáez que es capitana de Dinos Rugby Femenino y fue preseleccionada nacional; Rocío Antimilla que es seleccionada de Neuquén en Hockey Femenino y Gabriela Soto que ganó el circuito de Beach Vóley en Río Negro.
En general las deportistas no se sintieron disminuidas por su condición de mujeres en los deportes que realizan, pero si algunas mirada de reojo.
Jamín Sáez juega desde chica al Rugby y como no había rama femenina en Dinos, jugó con los varones, pero después nació el equipo y la cosa mejoró. La capitana destacó que si bien las respetaron cuando arrancaron, notaron una mirada distinta, “cuando comenzó el rugby femenino para los ojos de mucho era medio complicado, pero poco a poco fuimos desarrollando un buen nivel”.
Si bien el 8M es un día de lucha, las jugadoras señalaron que disfrutan y no sienten que están reivindicando sus derechos al hacer deporte.
Mirta Duran que juega al Básquet para el Municipal de Cutral Co dijo “desde los 4 años que juego al básquet, me crié en el Club Plaza, para mi siempre fue disfrutar el juego, compartir con las compañeras y nunca me impidieron hacerlo”. Su hija Gianella Espedale, que el año pasado jugó para la Selección U-13 y este año formó parte del Plan de Verano de la Federación, también vive el básquet de la misma manera, “yo de verdad lo disfruto y gracias a eso puedo divertirme”.
En algunos deportes destacan más las chicas que los chicos, como el Hockey sobre Césped y el claro ejemplo es el de Las Leonas que son más conocidas que Los Leones. Rocío Antimilla no sintió está presión y también asegura que trata de valorar todas las experiencias que realiza, “siempre trato de disfrutar, juego en el mismo club desde chica y en el 2017 y 2018 puede viajar con la selección de Neuquén. Conoces personas nuevas, torneos nuevos, es adaptarse y crecer”.
Cecilia Hugo habló desde su lugar en el Enduro, deporte ligado a los motores donde siempre hay un aire machista, pero dijo no haber sufrido ningún tipo de discriminación, “al principio eran todos hombres y de a poco se fueron sumando chicas”.
El trato institucional y los sponsors
Al momento de conseguir sponsors o apoyo del estado no experimentaron dificultades o diferencias relacionadas al género. En el caso de Cecilia Hugo señaló que “como es un hobby una trata de hacerlo cuando puede y cuando no se puede se deja de lado”.
En torno a lo institucional tampoco señalaron diferencias entre varones y mujeres, “en Dinos el esfuerzo es para todos, nosotros queremos crecer todos juntos, varones y mujeres” dijo Jazmín Sáez.
El aporte del estado es diferenciado
Por su parte Gabriela Soto si afirmó que hay un vacío en torno a los aportes del estado y al trabajo de las federaciones, “hace falta más apoyo al deporte femenino porque se desarrollan más las ligas masculinas. Si te fijas hay diferencias en básquet, en vóley lo más alto que hay es el Masculino, torneo femenino también hay pero se pone más énfasis al masculino. En casi todos los deportes pasa, casi todos los aportes económicos políticos van hacia lo masculino y falta un poco más en lo femenino para que crezca más”.
Bendecidas de crecer en la época actual
Las deportistas estuvieron de acuerdo que es más fácil para ellas hacer actividad física en la actualidad, ya que en pasado estaba mal visto que una chica practique alguna disciplina, o directamente no había lugares para ellas. “Antes no se veía que una chica jugara al fútbol, pero ahora si no está mal visto” opinó Tita Duran.
Ser femeninas y atléticas al mismo tiempo
En el pasado la mujer que hacía deporte era burlada porque tenía rasgos masculinos y se la trataba de “marimacho” o “machona”. Las entrevistadas coincidieron que las chicas pueden hacer deporte, sin dejar de arreglarse o sentirse femeninas. “Ahora la que hace deportes no es un estereotipo, es todo más abierto y es más fácil para la mujer practicar cualquier tipo de deporte que le guste, se ha crecido en todo de eso” apuntó Gabriela Soto.
El deporte en Familia desecha las barreras
Las jugadoras entrevistadas mostraron algo en común por lo cual su experiencia en el deporte es positiva y es que practican o practicaron su disciplina en familia.
El entrenador de Jazmín Saez fue su padre y en su momento compartió equipo con su hermana. Cecilia Hugo recordó que al principio eran todos varones los que corrían, pero después se fue plagando de Chicas el Enduro, “Ahora se disfruta en familia porque mi hija corre al igual que mi marido”.
Por su parte Gabriela Soto valoró que el entorno del vóley siempre fue mixto, “juego indoor y Beach, hay varones y mujeres y el ambiente es buenísmo, creo que es uno de los ambientes más sanos. He estado en otros deportes y creo que el vóley es el ambiente más sano que se puede disfrutar. Desde los 4 años juego y siempre fue así, mi mama y mi papá jugaron y siempre hubo compañerismo entre varones y mujeres”.
El Caso de Giannella y Mirta también es importante ya que se trata de una familia “manija” por el básquet. El padre, Facundo Espedale, jugó en Petro, Pérfora y Centro Español entre otros equipos y su hermano juega en Pérfora.
Mirta jugó en el Club Plaza y ahora en el Municipal de Cutral Co, mientras que Giannella termina de entrenar en el Verde, espera una horita y después se va a entrenar con su mamá. “Termino de entrenar, me cambio y espero que llegue el horario de entrenamiento de mi mámá y aprovecho a jugar con ella. Me divierto muchísimo, me río, la pasó muy bien y puedo jugar tranquila”. El Vículo madre-hija es más fuerte con una pelota de básquet.
Quieren más
Jazmín Sáez hizo un balance general y destacó que el deporte femenino está en un buen momento en la comarca, pero aseguró que no debe tener techo, “yo creo que está bien, pero podemos estar mejor en todos los deportes. Es cuestión que las chicas se animen e intenten probar distintas cosas”.