Hoy, los voluntarios de Plaza Huincul, festejaron 18 años de vida. Hubo ascenso para el personal y un agradecimiento para las familias. No hubo autoridades municipales en la ceremonia.
El acto, que tuvo ausencia de algunos voluntarios porque debieron salir a una emergencia, se desarrolló frente al cuartel. El jefe del cuerpo, José Acuña señaló a los presentes que “lo único que pedimos es un gracias. El gracias nos fortalece y nos ayuda”, a seguir adelante. Refirió que siguen a la espera de la ley que los contempla y protege. “Ya va a salir, algún día va a salir”, dijo.
Les pidió a todos que sigan esforzándose para capacitarse porque es lo único que necesitan. “A los bomberos y a los suboficiales que hoy empiezan una nueva vida. Les pido que se empiecen a esforzar para llegar alto, tienen otras responsabilidades”, les indicó.
Acuña agradeció la reincorporación de Graciela, a las filas de los voluntarios “es la mamá de Carlos “Toti” Vazquez”, para quien pidió un aplauso.
En la ceremonia se dispuso el ascenso para los bomberos Ernesto Karstan, Horacio Riveras y Gastón Gutiérrez, al grado de suboficiales subayudantes; mientras que de aspirante a bombero ascendieron a bomberos Macarena Sandoval, Héctor Alvear, Walter Lapadu y Jonathan Hernández.
