El secretario general del Sindicato del Petróleo y Gas, Guillermo Pereyra, asegura que la quita del subsidio al desarrollo del gas no convencional (Plan Gas) y la imposición de retenciones a la exportación “se trata de ataques al trabajo y a la inversión en la provincia”.
Poco antes de fin de año, Iguacel renunció como secretario de Energía de la Nación porque no estaba de acuerdo con la quita de subsidios y la imposición de nuevos impuestos.
Las dos medidas son “recomendaciones” del FMI para que no haya déficit fiscal. En el gobierno anterior si había subsidio a la explotación de nuevas áreas pero el precio del gas era bajo. Y habían retenciones al barril de petróleo que se exportaba.
Con Macri, las empresas se habían beneficiado con la quita de impuestos pero ahora se dio marcha atrás.
Pereyra recordó que “los trabajadores y las empresas hicieron un gran esfuerzo”. Los trabajadores vieron como se reducía su salario por la quita de beneficios como las horas de viaje. Además el incremento salarial quedó muy lejos de la inflación.
Esos “esfuerzos” no serian suficientes para sostener la fuente laboral ya que las empresas no producirían al mismo ritmo sin el subsidio.
“Las retenciones implican una intromisión en el vínculo entre refinadoras y operadoras por el precio interno del barril, que afecta toda la cadena de upstream no integrada que no encuentra, ante este escenario, la manera de defender sus actividades en la cuenca neuquina”, dijo Pereyra.