El Sindicato del Petróleo y Gas Privado, encabezado por Guillermo Pereyra, explicó ayer que hubo un acuerdo con las empresas a pesar de la situación mundial.
Pereyra fue duro al expresar que hoy el petróleo “regalado es caro”. En ese contexto se intentó mantener la mayor cantidad posible de fuentes de empleo.
Pero los trabajadores y trabajadoras que prestaban servicios y su contrato finalizó, no seguirán percibiendo un sueldo. Lo que se acordó es que reciban dos salarios vitales y móviles, unos 33 mil pesos, de parte del gobierno y el sindicato no los bajará de la obra social.
El secretario general pidió a los trabajadores contratados que se comuniquen con sus delegados porque el gremio tiene que solicitar a las empresas y pedir que los incluyan en el último decreto de Alberto Fernández, que les otorga ese beneficio.
Para los trabajadores que están efectivos y que permanecen en sus casas, se informó que se les pagará el sueldo básico, diferencial de turno, zona desfavorable y una vianda. “Es un acuerdo mejor a lo que teníamos antes” dijo Pereyra y consideró que en el acuerdo “le sacamos agua a las piedras”.
El acuerdo se formalizaría hoy o mañana, cuando todas las firmas estén digitalizadas.