En la tarde de este jueves se supo que fracasó la negociación entre el Sindicato del Petróleo y Gas Privado que comanda Guillermo Pereyra y las empresas petroleras, principalmente YPF.
Las partes hicieron conocer hoy sus posiciones. Las empresas sostienen que no están en condiciones de pagar el 16. 2% que había quedado pendiente de la paritaria del año pasado. Pero acordaron un incremento salarial para el gremio de Camioneros.
“Nos sentimos discriminados, hay gremios con los que acordaron un 30% de paritaria de este año y a nosotros nos deben todavía de la paritaria del año pasado y no lo quieren pagar”, le dijo Pereyra al diario Río Negro.
Pero este no es el único conflicto, sino el más emergente. Las empresas hicieron hacer oír su voz en el sitio EconoJournal.
Los directivos consideran que Pereyra ya no es tan fuerte dentro del gremio. Habían acordado con él una rebaja del 25% en el costo laboral. Lo iban a conseguir turnando a los trabajadores, sin goce de haberes. En realidad era una autorización para suspender por una semana a sus operarios sin goce de sueldo.
Para los operarios del segmento de Producción, el pre-acuerdo fijaba que cuando no tenían un trabajo asignado, esos trabajadores pasaban a ser remunerados bajo el esquema previsto según el acuerdo firmado con los gremios bajo el paraguas del artículo 223 bis de la Ley de Contrato de Trabajo. Como en el punto anterior, Rucci propuso que la implementación en detalle se negocie “compañía por compañía”.
Pero los cambios no cayeron bien a las empresas y ya no confían en Pereyra. A través del diario Río Negro, el sindicalista anunció paro de actividades y se mostró molesto por el cuestionamiento a su autoridad dentro del gremio.